Por: Franco Vallejos Torres (*)
Estamos perdiendo la esencia de la doctrina liberal y el objetivo de la discusión de ideas. Sin intentar formar un pensamiento homogéneo, noto un cierto error en el análisis de muchos jóvenes liberales (y mayores también) al ver a la pobreza como una causa y no como la consecuencia de las malas políticas económicas del gobierno. ‘’Cuanto más planifica el Estado, más complicada se le hace al individuo su propia planificación’’ (Camino de servidumbre- Hayek). Partiendo de esta base, debemos entender que el individuo lo que busca es sobrevivir, y hasta a veces, sin mirar el costo a su alrededor; podemos basar muchas de nuestras ideas también partiendo de la premisa de que toda la gente es honesta e inteligente y entiende que lo que recibe hoy en forma de plan mañana es el hambre de mañana, pero vamos a tener que tocar la realidad y entender que existen abusos por parte de los agentes que utilizan al sistema para sobrevivir (y está bien que así sea). Actualmente, la Argentina tiene 19 millones de personas cobrando un cheque del Estado, que está siendo mantenido por 8 millones (registrado) del sector privado que cada vez está más debilitado.
El culpable de esta cadena es el Estado, utilizando el aparato estatal para explotar al sector privado y hacer clientelismo político para captar los votos de la gente menos favorecida. Hay que entender que, en este proceso, las cargas ideológicas son muy altas y no muchos están dispuestos a morder la mano que te da de comer ni tienen la fuerza para hacerlo. El interpretar que las gentes son la causa de que la Argentina esté en decadencia por utilizar el último recurso económico (y moral) para subsistir, es quitarle la verdadera causa al asunto que es el Estado. Poniéndolo en aspectos no deseados, cualquiera de nosotros que esté en una situación de criar X cantidad de hijos y quiera buscar trabajo y no lo encuentre en un sector que cada día está más debilitado y tiene menos incentivos a contratar personal, va recurrir a cobrar un cheque del Estado solamente para comer.
‘’Pero esto lo estoy pagando yo con mis impuestos’’, ‘’estos vagos no quieren laburar’’, ‘’por su culpa la Argentina está como está’’, y para mí el mejor de todos ‘’hay que sacar todos los planes sociales’’. Estas frases hechas por personas que quizás, dicen llamarse liberales, terminan cayendo en una especie de clasismo nefasto y tirando a la basura todo el trabajo que se hizo hasta hoy con respecto de formar un liberalismo popular, por no entender que la pobreza es la consecuencia y no la causa. Que la gente vaya a tirar un cheque del Estado es lo mejor que puede hacer hoy en día, ya que, si no fueran por los planes sociales, todo volaría por los aires. Utilizar las frases antes dichas, es regalarles todo el discurso a los sectores izquierdistas: ‘’ ¿Ves? El rico tiene la culpa de tu situación porque se lleva el fruto de tu trabajo’’, muchas cosas pueden caer con ese discurso aunque no lo crean.
Para concluir, el liberalismo es lo más popular que existe porque tiene lo más importante que es la libertad. Al tener la libertad de nuestro lado, debemos hacerles entender a las personas que quizás cobran un plan o se ven en el afán de llorarle a un político porque ellos están encadenados a un sistema que busca mantenerlos así, dóciles, débiles e ignorantes para que papi Estado se encargue de su situación. Desde la explicación de por qué los precios suben hasta hacerles ver lo que podrían comprar si quitaran el IVA de los alimentos y otros bienes, es el verdadero trabajo que tiene el liberal que tiene ganas de que el mensaje llegue. Ejemplos nos sobran y nuestro país fue uno, debemos mantenernos firmes ante las falacias que reitera el gobierno y las ideologías disidentes, porque podemos formar cosas más grandes para por fin, despertar a la gente y sacarles las cadenas del Estado.
(*) Franco Vallejos Torres
Empleado de comercio exterior y Conductor de radio
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