Libertad es progreso
El actual gobierno argentino se empeña en culpar de todos los males actuales al neoliberalismo. No es el único gobierno que lo hace, esto se volvió una constante en la política económica actual. Esto genera varios problemas:
- Se habla de neoliberalismo sin especificar qué se entiende ni qué comprende este set de teorías.
- Al culpar al neoliberalismo, se pone todo lo que sean libertades económicas en la misma bolsa, dando lugar a un intervencionismo peligroso.
- Más allá de que la teoría y los programas aplicados del neoliberalismo puedan (y no lo fueron) ser perfectos, anular una teoría significa anular tanto lo bueno, como lo malo.
Todo esto siempre desde la retórica, desde “el relato”, porque es sabido que, tras años de heterodoxia (otro termino que puede significar muchísimas cosas, lamentablemente) monetaria y fiscal, los cuales sentaron las bases de los actuales problemas económicos argentinos, se tuvo que recurrir al llamado “ajuste ortodoxo”, el cual consiste en subir tasas de interés, contraer la base monetaria (hasta ahí), devaluar, quitar subsidios (o re-direccionarlos) y dejar de pisar tarifas de servicios. Todo lo antes dicho es un típico ajuste neoliberal. Todo lo antes dicho es lo que hizo el gobierno que habla acerca de que “Hay que dejar manuales que proponen el jarabe rancio del neoliberalismo“. El compañero Chávez no se quedaba atrás en esto de exportar culpas.
