Por: Diego Rojas Llamosas.

Nacido en el entonces Imperio Austro-húngaro en 1899. Ingresó en la universidad de esa ciudad justo después de la Primera Guerra Mundial, cuando era uno de los tres mejores sitios del mundo para estudiar economía. Estudió primeramente derecho, pero la economía y la psicología le apasionaron. La pobreza en la que se vio su ciudad natal, Viena, en la época de posguerra le hizo simpatizar con el socialismo, pero 1922 cuando leyó Socialismo de Ludwing von Mises, devastadora crítica de la planificación central, Hayek decidió acudir al curso de economía de Mises.

Desarrolló la teoría del equilibrio, la cual se basaba que en una economía de libre mercado las condiciones de oferta y demanda cambian constantemente, lo cual hace que los precios sean relativos. En 1931 se trasladó a la London School of Economics para conferenciar sobre la teoría misesiana de los ciclos empresariales, y comenzó su contienda con Keynes acerca de las causas de la gran depresión.

En 1947 junto con Mises, fundó la Sociedad Libertaria Mon Pèlerin. Tres años más tarde ingresó con Milton Friedman en la escuela de Chicago de economistas de libre mercado. Las ideas de Hayek no fueron muy populares durante mucho tiempo, puesto que los

gobernantes occidentales después de la Segunda Guerra Mundial, se vieron preferentes a las ideas de la economía keynesiana.

No fue hasta la década de 1970, cuando se revisaron sus propuestas a raíz de la crisis del petróleo, como la consecuente crisis económica. En el año 1974 le dieron el premio Nobel de Economía y sus ideas se convierten en un núcleo duro de los defensores del libre mercado como camino hacia la prosperidad y la libertad individual.

En la década de 1980, Ronald Reagan y Margaret Thatcher siguieron políticas encaminadas a desmantelar el estado del bienestar con la reducción de impuestos y recortes a las prestaciones sociales. Muchos líderes de las revoluciones contra los regímenes comunistas de Europa del Este también se inspiraron en Hayek.

A su muerte, en 1992, sus ideas eran muy influyentes. En el homenaje, del sábado 16 de mayo, organizado por el Club de la Libertad, se contó con disertaciones a cargo del Sr. Diego Rojas Llamosas, Abogado. Es Director Ejecutivo de la Fundación Gustavo González, en Asunción, Paraguay. El cual estuvo abordando temas generales referentes a la filosofía de Hayek, haciendo énfasis en su percepción sobre la importancia de la libertad, y el contraste con las ideas conservadoras.

Posteriormente, Iván Fonteina, estudiante de último año de la Carrera de Ciencia Política, socio adherente del Club de la Libertad del Grupo de Artículos y Coordinador de Pensamiento libre, habló sobre “Individualismo, el bueno y el malo”.

Por último, habló Ricardo Caito Leconte, Abogado, Director del Club de la Libertad. A su cargo estuvo un desarrollo histórico de su vida, publicaciones y entorno contemporáneo.