Por Horacio Fabián Villanueva
Este período se llama de «cuarentena» precisamente porque dura 40 días. Extenderlo más, significan dos cosas: por un lado, no haber hecho las cosas bien sanitariamente y por otro, comenzar a “naturalizar” la pereza y el estado de anomia -con sus graves implicancias-.
Ya sabemos las tres cosas básicas para este problema (desde la razón científica):
1°) Afecta a la población de adultos mayores
2°) Requiere de distanciamiento social -no de aislamiento-
3°) Requiere de mayor cantidad de testeos.
Si, para el punto 1°) Contamos con datos de la población más afectada -mayores de 70 años en la Argentina-; 2°) Conocemos las medidas básicas de distanciamiento para el no-contagio; 3°) estamos Testeando más para aislar a los posibles transmisores sintomáticos. Deberíamos estar saliendo de cuarentena el: 30/4 y volver, paulatinamente, a la actividad normal durante las dos primeras semanas de mayo; para que sea total la actividad la tercera semana de mayo. Prolongar la “cuarentena” será, no sólo imprudente sino negligente, pues ya no vivimos en el siglo XIX o XX, donde las decisiones eran lentas, eternas.
La sociedad del conocimiento del siglo XXI nos brinda herramientas para actuar de la mejor manera, estratégica y racionalmente posible. ¡Aprovechémosla! De lo contrario, seremos esclavos -eternos- de las “ideologías a-científicas y masificantes” del discurso del líder de turno…
Horacio Fabián Villanueva, Docente y Lic. en Psicología.
Colaborador de la Fundación Club de la Libertad.