Sin Libertad de Prensa no hay libertad, y sin libertad…

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Por Carlos Moratorio

La decisión de gran parte del Senado argentino en promover un proyecto de Ley de Reforma de la Justicia, que incluye normas preventivas contra la libertad de información y opinión, evidencia un grave desconocimiento de lo que significa en términos modernos, el sistema  republicano.

El problema es que ese desconocimiento o incomprensión de lo que llamamos República, proviene de la mayoría  de los integrantes de una de las instituciones liminares en nuestro  sistema constitucional.

Lo que deberíamos hacerle  entender,  a estos Senadores es lo siguiente: El sistema republicano se basa en la existencia de tres poderes que se controlan mutuamente y equilibran de esta manera su poder. El Ejecutivo, el legislativo y el Judicial, que conforman la estructura de nuestro sistema republicano de Gobierno.

Dicho esto conviene recordar, que el mencionado sistema no se agota en esta descripción formal, se asienta primariamente en el ejercicio de la soberanía del pueblo, y esto solo puede cumplirse cuando la ciudadanía tiene acceso a la más amplia información, cuando se puede conocer las opiniones de todos los interesados sobre algún tema de interés general, o particular, en un contexto amplio y diverso.

A esa libertad de información y opinión, nuestra Constitución Nacional la denomina libertad de prensa y le brinda una protección estratégica, habida cuenta de su importancia en el juego de dichas instituciones.

Llegamos ahora al punto de inicio. Un grupo de resentidos legisladores, o de legisladores que acompañan a algún resentido, pretenden pasar por alto el sistema que nos garantiza vivir en libertad, tal cual como la como lo conocemos y queremos seguir ejerciéndolo. La base histórica de la Argentina nos recuerda que desde mayo de 1810, “El pueblo quiere saber de qué se trata”.

Aunque algunos se quieran hacer los distraídos, o quieran encubrir distraídamente a alguien, conviene insistirles en que sin libertad de prensa no habrá libertad, y sin libertad tampoco tendremos República.

Debemos hacérselo entender entonces. De todas las maneras posibles.

Carlos Moratorio

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