¿Todo lo que sube, baja?

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Por Alvaro Lataza

Los números hablan, y dicen mucho… pero en este caso, más que hablar están gritando y se están desgarrando las cuerdas vocales, pero para entender este mensaje es necesario que entendamos de donde viene el ccl y que le da su valor.

Algunas empresas Argentinas como por ejemplo Galicia, Ypf, Banco Macro, Pampa energía S.A., cotizan no solo en bolsa local (Merval) sino también en las bolsas americanas, como en el Nyse (New york stock Exchange) o el Nasdaq con sus respectivos ADR, es decir que cotizan en ambas bolsas.

Pero, ¿qué es un ADR?

Por sus siglas en inglés, American Depositary Receipt, es una acción NO estadounidense que cotiza en mercados americanos. Es un título físico equivalente a un depósito de acciones de una empresa extranjera a una entidad financiera americana.

Esos títulos pueden ser cambiados por las acciones de origen, es decir una persona en el exterior en posesión de algún ADR puede solicitar su cambio por las acciones originales que cotizan en el Merval en el caso de nuestras queridas empresas.

Pero también se puede hacer el proceso inverso, que sería comprar acciones locales que también coticen en los mercados antes mencionados y pedir su cambio a ADR en el exterior. Dado que las cotizaciones locales son en pesos y los ADR en dólares, la cotización o paridad utilizada entre ambas monedas es el dólar CCL o mejor conocido como “contado con liqui” que también es utilizado con bonos como por ej: AO20 y AY24.

 

¿Y que hace que suba o baje el ccl?

Nada más ni nada menos que el libre juego de oferta y demanda del mercado. Como bien sabemos, una mayor demanda implica un aumento en el precio, como así, una mayor oferta implica una disminución en el precio.

Y en este mercado, un aspecto clave a destacar de este tipo de paridad, así como también sucede con el dólar blue o el dólar mep, es que no tiene una limitación en la cantidad de compra (como si lo tiene el dólar oficial con el cepo de $200 dólares mensuales), es decir, la demanda es libre, entonces su valor lo dicta el mercado.

Ahora que ya vimos qué es el dólar ccl, y mencionamos que hace variar su precio, tomemos el caso de una acción en particular para realizar un análisis.

Por ejemplo, si tomamos a Galicia, y observamos el gráfico de la cotización de su ADR (NASDAQ:GGAL), vemos que en los últimos días no tiene variaciones importantes:

Sin embargo, si lo comparamos con el gráfico de Galicia a nivel local (BCBA:GGAL), vemos que hay una suba repentina en estos días.

Seguidamente procedamos a calcular el valor del dólar ccl. Para ello tenemos que realizar el cociente entre: cotización de la acción local en pesos y cotización de su respectivo adr en usd muliplicado por su factor de conversión. El factor de conversión al que hacemos referencia anteriormente es un valor prestablecido para la equivalencia de las acciones cotizantes en ambos mercados. Para el caso particular de Galicia, dicho factor es 10.

BCBA:GGAL / (NASDAQ:GGAL*10)

Cabe aclarar que, cada acción tiene su propio ccl, y suelen tener pequeñas diferencias. Para nuestro ejemplo tomamos a Galicia por ser la acción que mayor volumen tiene en nuestro mercado, por lo tanto, es la más representativa.

A continuación, veamos el gráfico del ccl de Galicia:

En el gráfico anterior podemos observar una violenta suba del precio en los últimos días.

 

Pensemos, ¿qué nos está diciendo esta suba del dólar ccl? Que claramente hubo un fuerte aumento de la demanda, pero ¿por qué piensan que se dio este aumento de demanda?

Tratemos de analizarlo. Para comenzar, sabemos que la bolsa es una cuestión de expectativas, y en realidad, no solo la bolsa, sino también todas las decisiones económicas que tomamos. Todo el tiempo tomamos decisiones de, si consumir tal o cual bien, o si en cambio ahorramos ese dinero, y todo se basa en expectativas. Ahora repasemos el escenario actual que estamos viviendo, nos encontramos ante una emisión descontrolada para cubrir gastos corrientes, que vendría acompañada de una alta inflación, tasas reales negativas, una deuda pública impagable, bajas reservas del BCRA, y donde las únicas ideas parecen ser las de crear más impuestos. Entonces, pareciera una consecuencia lógica y bastante lineal que quienes tengan la posibilidad, ante este panorama, van a buscar proteger su capital de las garras del sistema financiero argentino y deshacerse de los pesos sobrantes, haciendo uso del dólar ccl, mecanismo a través del cual pueden acceder al dólar sin limitaciones.

 

Este es un ejemplo contundente de como la falta de disciplina fiscal del estado y su consiguiente depredación ideológica e impositiva termina ahuyentando capitales que corren despavoridos pagando altas comisiones inclusive solo con tal de resguardarse, que de ser otra la historia, podría volcarse a la economía real, se podría invertir para aumentar la capacidad industrial e inclusive este capital podría ir al mercado financiero (del cual una economía saludable necesita y mucho), porque hasta un inversor novato prefiere invertir y hacer trabajar su capital a que tenerlo inmovilizado, depreciándose y perdiendo oportunidades.

 

Visto todo lo anterior, me parece pertinente la idea de que al capital no se lo puede forzar a invertir donde uno quiere, sino que hay que conquistarlo mostrándoles que uno es un pretendiente con buenos hábitos, siempre mirando al futuro y sobre todo con expectativas de crecimiento, o en su defecto alguna mínima intención de ello.

 

Alvaro Lataza

Arquitecto, y corredor de bolsa en mis tiempos libres.

Integrante del equipo de publicaciones de artículos de la fundación Club de la Libertad.

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